Teatro. Don DeLillo. Seix Barral. 2011. 349 páginas.
Entre su primera novela, Americana (1971), y la última, Punto Omega (2011) –reseñada no hace mucho en esta sección-, han transcurrido cuarenta años y más de una quincena de narraciones. Don DeLillo es uno de los más importantes escritores estadounidenses de los últimos tiempos. Es sobre todo novelista y narrador, pero también ha publicado algún ensayo y varias obras de teatro. Su producción teatral ha sido recientemente traducida al español y reunida en un solo libro que acaba de ser editado en nuestro país.
Teatro contiene las cinco obras teatrales escritas y estrenadas por Don DeLillo hasta la fecha. La más antigua data de 1986 y la más reciente del año 2006. Tres de ellas -La habitación blanca, Valparaíso y Sangre de amor engañado- son obras largas; las otras dos -El arrebato del deportista en su asunción al cielo y El misterio en mitad de la vida ordinaria- son brevísimos textos de sorprendente intensidad cuya representación debe durar solamente un minuto.
Abre el libro La habitación blanca, una magnífica comedia negra de estructura circular que presenta un inquietante y ambiguo juego de falsas identidades que desorienta por completo al lector. Mientras que en el primer acto, las ambigüedades y equívocos sucesivos se producen entre los médicos y los pacientes de un hospital psiquiátrico; en el segundo, ese juego deriva hacia una reflexión sobre el teatro y la vida, mezclando ambas cosas de manera tan indiscriminada que somos incapaces de diferenciar entre los personajes de verdad y aquellos que simplemente están representando un papel. Hay en ese juego de identidades algunas similitudes con el teatro de Pirandello, pero también se aprecian en la obra muchas características del llamado teatro del absurdo.
Valparaíso, cuya representación no parece del todo fácil, es una parodia hiperbólica y crítica sobre la presencia obsesiva de los medios de comunicación en nuestras vidas (“La vida fuera de las cámaras es inverificable”). Tiene en muchos momentos una cierta carga erótica y su contenido de fondo es pesimista y desencantado. La palabra clave del hombre que busca su propia y durísima verdad en la vida es la palabra caducidad. Sangre de amor engañado, que toma su título de uno de los nombres populares ingleses de la flor que en español se denomina amaranto, es una intensa y profunda obra que trata principalmente sobre la eutanasia.
Conocíamos a Don DeLillo como novelista, este libro nos permite acercarnos al DeLillo dramaturgo. Un autor cuyas obras teatrales, tanto en la forma como en el contenido, están impregnadas de la mejor modernidad.
Carlos Bravo Suárez
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